Me gustaría comenzar este artículo sólo pidiéndote una cosa sencilla y llena de lógica: Tanto si tienes un gato (o perro) comprado, como si has elegido adoptarlo, da igual si es de raza o mestizo, cuídalo y quiérelo siempre, procúrale todas sus necesidades, edúcalo bien y nunca lo abandones.

Tanto unos como otros se merecen una vida feliz.

(María)

De raza o mestizos, mestizos o de raza…

¡GATOS y PERROS, al fin y al cabo! ¡Qué más da!.

Tristemente, hay quienes relacionan un gato (o perro) de raza o pedigree con un símbolo de estatus. Quizás, hasta en el sector felino y canino se busque el aparentar.

En absoluto tenemos nada en contra de los animales de raza pura, simplemente, lo que intentamos explicar es que no es lo más importante cuando lo que buscas es un buen y leal compañero de vida.

Los mestizos gozan de mejor salud

Comenzaremos diciéndote que los estudios demuestran que los gatos (o perros) mestizos gozan, en general, de mejor salud y con una mayor esperanza de vida, pues la naturaleza es sabia y suelen ser gatos (o perros) mejor adaptados al medio. El gato mestizo, también conocido como gato común, suele ser más resistente y tiene una mayor respuesta inmunológica.

Esto se debe, en parte, a que no suelen heredar problemas de salud por consanguinidad.Es decir, en las razas puras, algunos criadores, realizan prácticas como la endogamia, en las que cruzan a miembros de la misma familia para preservar ciertas cualidades de la raza. Esto no es recomendable y está totalmente desaconsejado ya que puede provocar la aparición de mutaciones genéticas.

Apariencia estética vs salud

En ocasiones, prima más lo que algunos consideran ‘belleza’ que la propia salud del animal.
Debido a la forma artificial en la que, algunos criadores, realizan  determinados cruces, hay razas lamentablemente ‘condenadas’ que, lejos de mejorarlas, lo que están provocando es que se críen gatos y perros con más problemas, más enfermedades y con una esperanza de vida menor. Lo cual, por consiguiente, ocasiona a los propietarios muchas visitas al veterinario, un gran gasto económico y muchos disgustos.

En muchas razas se ha tendido a exagerar demasiado algunos atributos físicos de una forma demasiado artificial y premeditada. Por ejemplo, en el caso de los gatos: el gato Persa, por genética, es muy propenso a sufrir la enfermedad del riñón poliquistico o el gato Esfinge, que al no estar provisto de pelo, están tan desprotegidos ante el frío y la radiación solar que solo pueden vivir en el interior. Y, en el caso de los perros: el Shar-pei cada vez con más arrugas, lo que le provoca problemas en la piel y en los ojos, el Bulldog francés con su morro tan chato que le imposibilita respirar bien, el Pastor alemán con una exagerada y marcada cadera baja que le deriva en problemas de displasia, etc.

Todo esto provoca en muchos animales un padecimiento y dolor innecesarios.

Favoreces el mercado ilegal

Además, se le suma, que en muchas ocasiones, comprando gatos y perros de raza, financias el mercado ilegal de criaderos clandestinos. De acuerdo, estos animales también se merecen un buen hogar pero, si se siguen comprando y demandando, seguirán existiendo y seguirán explotando a perras y a sus cachorros. Se necesita una mayor regulación en este aspecto.

Sinceramente, cada uno es libre de elegir y es humano tener unas tendencias y unos gustos. Pero creemos que es nuestro deber informarte y, quizás, enseñarte a que sepas mirar detrás de toda esta estética y descubrir también la necesidad y ese cariño incondicional.

Así pues, no recomendaríamos basarse en la raza pura a la hora de adquirir un perro, da igual si es comprado que adoptado. Siempre es más importante  fijarse en el tipo de gato o perro que buscamos o que más nos convendría según su carácter y el tipo de vida que nosotros llevemos.

Las protectoras y asociaciones están llenas de gatos (y perros), y en ellas puedes encontrar tanto animales de raza como mestizos. Si estas pensando en adoptar, estaría bien que te pusieses en contacto con alguna.