Los pájaros y el ecosistema
imagen de portada: Alex Iby on Unsplash
Esas bellas criaturas que tienen la maravillosa capacidad de poder volar, que nos deleitan con su cantar, con sus coloridos plumajes y que adornan el cielo.
Los pájaros son tan delicados y sensibles, que cualquier cambio en el ambiente que les rodea, por mínimo que sea, lo notan. Observándolos podemos saber mucho acerca del entorno, pues son un perfecto indicador del estado del ecosistema. Si un lugar puede resultar peligroso o poco apropiado, son los primeros en huir. Además, gracias a ellos podemos evaluar los impactos de las actividades humanas y los efectos del cambio climático.
Y no solo nos hablan del ecosistema, sino que cumplen funciones muy importantes dentro del mismo. Las aves son polinizadoras y ayudan a dispersar las semillas de un lado a otro, facilitando la reproducción de las plantas. Consumen muchos insectos, lo que hace que se controlen las plagas y, las que son carroñeras, sanean el ambiente comiendose los restos de animales muertos.
Por si esto fuera poco, también nos marcan las estaciones y el estado del tiempo. Nos cuentan si el día va a ser soleado o si va a llover. Cuando el frío llega nos abandonan emigrando a lugares más cálidos y en primavera vuelven a visitarnos.
Existen en torno a unas 10.000 especies diferentes de aves. Aún así, algunas se encuentran amenazadas. Su conservación es de vital importancia.